Hemos de reconocer que dentro de la arquitectura, la actividad que, por formación y por afinidad profesional, nos gusta más es la reforma de edificios construidos. A pesar de que se trata de proyectos más complejos y que resultan más difíciles de encajar, nos sentimos más cómodos en esta faceta. Es una labor que exige conocer muchos sistemas y metodologías que hoy en día ya no existen; y que demanda ser profundamente respetuoso con lo que nos encontramos. Esto no solo afecta al patrimonio del edificio que vamos a transformar, sino que también hay que tener en cuenta la transformación experimentada por su entorno y que, tal vez, el uso inicial de esa construcción ha perdido su esencia y necesita derivarse hacia otra utilidad. Es una circunstancia que genera proyectos de alta complejidad pero que arroja resultados muy interesantes.

En el año 2014, nos plantearon un proyecto apasionante, la renovación de una antigua casa de indianos de finales del siglo XIX, en el municipio de Alella, para transformarla en hotel. El complejo contaba con edificaciones de tipo administrativo e industrial y con una antigua cava que el cliente deseaba mantener. Ahí tuvimos que compatibilizar la voluntad del cliente con el uso al que iba destinado, con la historia que atesoraba el edificio, con las singulares características topográficas y con la normativa urbanística. Había que conseguir un encaje perfecto, con un resultado armonioso pero, sobre todo, que funcionara porque para nosotros si no funciona, no existe el proyecto.

Pero lo que nos retó a mitad de proyecto, no fue ninguna de las dificultades comentadas anteriormente, fue cuando el cliente decidió que quería elevar la categoría del establecimiento a cuatro estrellas en mitad del proyecto. Aunque la verdad es que ya no nos sorprende la existencia de cambios. Es más: casi los esperamos; y estamos preparados para asumirlos. Pero lo ideal es plantear todas las ideas y necesidades cuando todavía estamos trabajando sobre los planos. Si quieres saber más sobre este proyecto click aquí.